Después de las malas noticias recibidas ayer, la reunión semanal de seguridad ha sido tensa. Pocos tenían ganas de hablar, especialmente al comienzo de la misma.
Faltaba el Jefe del Sector, Gen. Chuman, quien, si se encontraba en Walikale, solía asistir a estas reuniones.
El encuentro, además de intenso, fue largo, y en él se debatieron numerosos temas que, por motivos de seguridad, especialmente ahora, no se pueden detallar.
Pero sí hubo un recuerdo emocionado para con los caídos en la emboscada de ayer y para cuyo funeral se pidieron donativos.
El día, además, ha acompañado, y ha sido uno de los más oscuros y tristes desde que estoy aquí. Ha llovido durante toda la mañana.
Esto ha hecho que el helicóptero que debía aterrizar en Walikale no lo haya hecho. En él, esperábamos un nuevo miembro del team Site, un oficial indio, y un técnico para revisar algunas deficiencias en los equipos de comunicaciones. Pero no han podido llegar.
Por la tarde ha dejado de llover y eso me ha permitido salir a correr un rato. Ya, casi anocheciendo, un tímido sol asomaba para despedir el día.
