Hoy lunes, vuelta a la normalidad.
El nuevo Team Leader, Roslam (Malasia) y yo hemos salido en
dirección Sur, para visitar Basisi, a unos 16 km. En poco más de una hora hemos
llegado a este poblado.
Basisi |
Como todos los de esta zona, Basisi no presenta problemas
importantes de seguridad, pero la pobreza y la escasez de recursos es extrema.
Aquí la selva es imponente y no deja respiro para el cultivo.
No es normal, pero, en vez de hombres, nos han recibido
cuatro mujeres, una de ellas, para nuestra sorpresa, era la jefa del poblado.
Lugar de la reunión |
Nos han recibido dentro de una de las chozas del pueblo, y
allí hemos hablado sobre sus problemas.
Como muchas aldeas y pueblos de este país, el hecho de tener
que acoger desplazados, aquí hay más de 70 familias, sumergen a estas
poblaciones en la más absoluta de las miserias, al tener que compartir lo poco
que tienen con estos nuevos habitantes.
Aun así, Basisi intenta salir adelante y pronto recibirá
ayuda por parte de Solidarité, una de las ONG que trabajan en la zona.
Por la tarde, lo de siempre, carrera y elaboración de
informes.