Hoy, de nuevo de servicio.
Hemos aprovechado para conseguir una cabra, ya que se ha
acabado la carne. Así que, entre buscarla y sacrificarla se nos ha ido la mañana.
Por la tarde, por fin, una tormenta trajo algo de agua que
ha refrescado mínimamente el ambiente. La noche anterior había sido
insoportable el calor.