Lo que irremediablemente tenía que pasar, pasó. Después de
mucho tiempo de roces en la zona de la minas de Bisie y Omate entre el FDLR y
los May May Cheka, y ante la pasividad mostrada por las FARDC, que, ni siquiera
tienen a nadie desplegado allí, ayer comenzaron cruentos combates entre ambos
grupos. Comenzaron por Mayuwano, extendiendo la lucha a Mafilo y, finalmente,
Omate. El FDLR ha quemado todas las casas de la aldea de Mayuwano y violado a
varias mujeres. Todos los habitantes de esta zona, unos 1500, han decidido
abandonar sus casas y buscar refugio en la segura Mubi, en el eje NW, el que
lleva a Kisangani. Los combates, a estas horas, continúan, sin que se tengan
datos fehacientes del número de muertos y heridos producidos en los mismos.
Así que, a pesar de que la patrulla hoy la debían realizar
el Team Leader y G.B., fui yo el que acompañó al indio para obtener más
información de lo ocurrido. Sin más dilación, nos dirigimos directamente a
Mubi.
Como ya comenté en una entrada anterior, Mubi es un pueblo
bastante grande, con un Batallón de las FARDC desplegado allí y mucha policía,
lo que lo hace seguro. Además, en esta zona no se dan los problemas que se dan
en el eje NE (el de Goma), con los continuos saqueos a la población por parte
de algunos de los miembros (muchos, desgraciadamente) de las FARDC. Esta zona
es bastante próspera, y además, se encuentra rodeado de varias pequeñas aldeas,
cuyos habitantes trabajan en granjas, obteniendo recursos que venden en el
mercado de la “gran” Mubi.
Calle principal de Mubi |
Además, muchos de los habitantes de esta zona viven del
transporte de minerales desde las minas hasta Kilambo, donde se carga el
mineral en avionetas para su posterior traslado casi siempre a Ruanda.
Pero aun con todo esto, no tiene la suficiente capacidad
como para acoger, de golpe, a otras 1500 personas. Lo más probable que esto
desencadene una tragedia humanitaria.
Después de entrevistarnos con el Jefe de la Policía en Mubi,
tuvimos la oportunidad de hablar con varios de los que habían huido de los
combates de Omate.
Todos ellos eran trabajadores de las minas. Había también
alguna que otra mujer, bueno, más que mujeres, eran auténticas niñas. Dos de
ellas portaban un apero hecho a base de vistosas telas de colores, amarradas en
torno a la frente de la porteadora, y cargadas de mineral. Pude coger uno de
esos “paquetes” y, sin lugar a dudas, no pesaba menos de 25 kg. Ese es el peso
que portan estas mujeres durante aproximadamente 6 horas a través de la selva,
desde las minas hasta Mubi o Kilambo. En el trayecto, van dejando peso en forma
de “tasas” que les cobran numerosos miembros del FDLR o los May May. Es decir,
que calculo que el peso con el que salen de las minas es superior a los 40 kg.
Estos porteadores, que son muchos, al llegar a Mubi o a
Kilambo, vuelven a cargarse de mercancía, tales como alimentos, ropa, víveres,
etc. para abastecer a los trabajadores de las minas, con lo cual, se vuelven a
internar en la selva otras seis horas cargados de estos productos. A cambio de
todo este trabajo, reciben una muy pequeña cantidad del mineral que
transportan, que cambian por los alimentos que les hacen sobrevivir.
Tras el mal trago que supone el ver a esta gente que, además
de la vida de auténticos esclavos que soportan, se han quedado sin casas y sin
nada, decidimos visitar un par de aldeas de los alrededores de Mubi para para
pulsar el ambiente. Más de lo mismo.
En estas aldeas, la mayoría de sus habitantes viven, o bien
del transporte del mineral, o bien de las granjas que abastecen, precisamente a
la zona de las minas y a Mubi.
Kabusa es una de ellas. Nos reciben en una casa hecha a base
de grandes listones de madera y nos cuentan que la situación es muy
preocupante. La gente no puede trabajar, ya que no puede desplazarse hasta la
zona, y sin trabajo, no hay comida. Me sorprendió gratamente ver que en la
choza, además del jefe del poblado y de otro hombre, dejaron entrar a dos
mujeres, una de mediana edad y otra bastante joven, las cuales no dejaron de
intervenir durante toda la entrevista. No es normal que en este tipo de actos,
las mujeres estén presentes, y mucho menos que den su opinión y hablen en
tantas ocasiones como en Kabusa.
Kabusa |
Lugar de la entrevista |
En la aldea de Bilobilo no se respiraba un ambiente mejor.
Allí nos recibieron en el típico lugar de reuniones de las aldeas. Aunque
Bilobilo es grande y próspero, e incluso cuenta con escuela, la situación que
se vive en Omate, les ha sobrepasado y las caras de los siete u ocho hombres
que nos recibieron, reflejaban preocupación y pesar. Nos pidieron encarecidamente
que hiciéramos algo, o nosotros o el gobierno, que de no hacerlo, ellos mismos
tendrían que defenderse.
Bilobilo |
Lugar de la reunión (éste sí que es el típico) |
Una vez más, la impotencia de no poder hacer casi nada para
resolver estos problemas hizo mella, tanto en mí, como en el Oficial indio, a
quien el testimonio de estas gentes también había conmovido.
Al regreso, hicimos un pequeño “tour” por Walikale, para
informar de la situación al administrador, a la OCHA y a las FARDC. El Jefe del
Sector, a propósito, aún no ha regresado de Goma. Se llevará a cabo un estudio “serio”
por parte de los comandantes de las FARDC presentes en la zona, y se celebrará
una reunión próximamente para intentar resolverlo.
A la vuelta al TS, elaboración de un completo y especial
informe y la carrera de todos los días, hoy, bastante desalentado por el curso
que están tomando los acontecimientos.