Esta mañana me correspondía llevar a cabo una patrulla.
Amanecer desde la casa |
Las
patrullas de los Observadores Militares consisten en establecer contacto con
los habitantes de una localidad en concreto. Normalmente, se programa una
localidad por día. En estas localidades (la mayoría son aldeas de no más de
diez o doce chozas) se realiza un sondeo de la situación que viven allí. Se
obtienen datos acerca de si ha habido o no algún tipo de incidente en la
población, tales como atracos, violaciones, asesinatos, etc. Sorprende ver lo
frecuente que son estos tipos de incidentes en esta zona. Además, se obtiene
información acerca de la regularidad con que las FARDC (Fuerzas Armadas del
Congo) y la PNC (Policía Nacional) patrullan la zona. En la mayoría de los casos,
no suelen hacerlo.
También se obtiene información acerca del número de personas
que habitan la localidad, cómo viven, de qué se alimentan, si hay escuelas o
centros de salud, etc.
Todo esto se refunde en un informe diario que, junto con los
de todos los Team Sites se dirige a los estamentos competentes, para intentar
dar solución a dichos problemas. NN.UU. reconduce esta información y la dirige
bien al Gobierno Congolés, ante una posible situación de inestabilidad en la
zona, o bien a sus organismos humanitarios y O.N.G.,s para intentar paliar en
lo posible la escasez de recursos de los poblados.
Pero es muy difícil que tanto la ayuda en materia de
seguridad, como la humanitaria llegue a todos estos pueblos perdidos en medio
de la selva.
La patrulla la componen dos MILOB,s, en este caso, Moses (de
Kenia) y yo y el intérprete. Van en un solo vehículo y se hace de mañana.
Esta mañana, después de la reunión diaria del TS, salimos
hacia la zona. Desde Walikale únicamente salen tres caminos, uno en dirección a
Bukavu, otro hacia Kisangani y otro hacia Goma. El resto de la zona es impracticable,
Es selva virgen, únicamente habitada por plantas y animales. Estos caminos son
de no más de dos metros de ancho, en unas condiciones paupérrimas, máxime con
el agua que cae a diario. Hay zonas a las que no se puede llegar debido a la
inviabilidad de dichas rutas. Desde aquí, se puede llegar por camino a
Kisangani, pero las otras dos rutas no llegan a su destino (Goma y Bukavu) están
cortadas, bien sea por un puente inexistente, bien porque se convierten en
sendas únicamente transitables a pie. Con esto es fácil imaginar la dificultad
que tiene el hacer llegar cualquier tipo de ayuda.
De todas formas, las patrullas se programan hasta lo más
lejos que se puede ir en vehículos. Luego, el camino dirá si se puede llegar o
no.
Una vez salimos de Walikale, el camino se hizo estrecho y
siempre rodeado de una muy densa vegetación. Tal y como se veía desde el aire,
está todo cubierto de árboles y plantas de todas clases. Si uno intenta ver lo
que hay más allá de un metro del camino, lo único que ve es la oscuridad, ya
que a estas zonas no llega ni la luz del sol.
De vez en cuando, se veían grupos de chozas desparramadas a
lo largo del camino. Esos son los poblados que debemos visitar en nuestras
patrullas. Estas chozas están hechas básicamente de barro con un tejado de
paja. Al paso del vehículo de la patrulla, numerosos animales atravesaban el
camino en estos poblados, patos, gallinas, manadas completas de cerdos, cabras,
etc. Además, muchos niños se acercaban al coche en cada poblado. Los niños de
aquí no son muy distintos de los que vi en Afganistán, salvo por el color de la
piel. Descalzos y vestidos con harapos, muy sucios y con la mirada llena de
esperanza y a la vez desaliento.
Eso
sí, aquí no presentan signos de desnutrición. Tienen alimentos naturales,
animales y plantas de sobra, así como agua. El problema que tienen es la
salubridad de esas aguas y la cantidad de enfermedades que contraen. Sólo uno
de cada cinco niños nacidos con vida, llega a la edad de cinco años.
Tras 26 kms, hechos en casi dos horas, llegamos a una zona
en la que el keniano dijo que no se podía pasar con el coche. Él empieza el
check-out para irse a casa este martes, con lo que no quiere complicarse en
absoluto la vida, pero yo estoy seguro de que el coche pasaba por allí. Así
que, como se suele hacer, para la vuelta, conduje yo y visitamos uno de los
poblados previstos y otro no previsto para sustituir el que no pudimos acceder.
En el primero de ellos nos recibieron unos cuatro hombres en
una cabaña hecha por completo de madera. Fuera de la cabaña, además,
permanecían dos mujeres e innumerables niños. Nos hablaron de los problemas que
tienen. Un par de atracos por parte del FDLR (es un grupo ruandés que actúa en
esta zona para obtener dinero. Su objetivo: derrocar el actual gobierno de
Ruanda y volver al poder establecido anteriormente. Sus posibilidades: nulas).
No tienen ni escuela ni centro sanitario. Algunos niños van
de vez en cuando a una escuela a 5 kms. andando.
Cuando se les pregunta por las elecciones, dicen que se las
80 personas del poblado en edad de votar, la mesa electoral (controlada
descaradamente por el actual presidente Kabila) sólo dejó votar a uno, quien
iba a votar precisamente a Kabila. El resto, se hizo 7 kms de ida y otros siete
de vuelta andando en balde.
Cabaña donde se llevó a cabo la reunión en la primera aldea. |
En el otro poblado la situación era diferente. Me sobrecogió
ver la imagen de una mujer mutilada intentando hacer no sé muy bien el qué con
un montón de mariposas que había capturado con una red pegajosa. Supongo que
las llevaría a otro lugar para venderlas para consumo. Además de ella,
únicamente se encontraban en el poblado otros dos hombres. Uno de ellos parecía
muy disgustado. Los habitantes de este poblado fueron víctimas no hace más de
tres semanas de combates entre el FDLR y los guerreros May May (en la foto explico algo de ellos). Estos combates
se llevaron a cabo en el poblado y hubo 2 muertos y tres o cuatro violaciones.
Desde entonces, los habitantes de la aldea se van a dormir a otro poblado más
seguro, a unos 3 kms., y sólo acuden a sus casas durante el día para trabajar.
Este hombre decía que, a pesar de haber informado a todo el mundo, la situación
no ha mejorado, ya que no hay presencia ni policial ni de las FARDC.
Arriba y abajo. 2º Poblado, sus habitantes huyeron hace dos semanas por miedo a que se reprodujeran los combates entre el FDLR y los guerreros May May |
Después, regreso al TS, comida y descanso. Volví al
campamento indio para jugar al baloncesto, pero la tormenta diaria se adelantó
esta vez y sólo pudimos jugar unos diez minutos. Luego, elaboración del informe
diario y fin del día.
En cuanto a la situación general, por fin se ha dado a
conocer el resultado de las elecciones y, cómo no, ha ganado Kabila, el actual presidente. Se están
produciendo fuertes disturbios en Kinshasa y en Lubambashi, pero aquí la
situación es de calma. Sólo algunos grupos han salido a celebrar la noticia. De
todas formas, seguimos atentos a las noticias que se vayan produciendo.